1. Conocer las publicaciones

1.3. Características de una publicación

1.3.1. Características comunes

Tanto en soportes impresos como electrónicos, y aunque siempre exista alguna excepción que rompa la regla, podemos identificar una serie de características comunes a cualquier tipo de publicación. A continuación describimos algunas de las más esenciales:

El formato

Una publicación es un elemento que funciona como unidad independiente de contenido. Dando por sentada la existencia además de publicaciones seriadas organizadas por tomos o secciones que forman un total, en cuyo caso podríamos hablar de codependencia entre las partes, una publicación es, en definitiva, un objeto. Este objeto puede ser plano, como un folleto, fácilmente transportable como un fanzine, voluminoso como un libro extenso o hecho de bits como un blog. De entre una multiplicidad de escenarios infinita, y sea como sea nuestro objeto, su contenido es narrado a través del espacio que este ocupa. La forma que nuestro objeto editorial adopte está, a su vez, estrechamente ligada a ciertas voluntades y constricciones de producción, pero esto lo veremos más adelante. Por poner un ejemplo aleatorio, si queremos hacer una publicación interpretando de manera personal el Génesis, como ya hizo en su momento Roberto Equisoain, no será lo mismo si copiamos el libro original entero en mil páginas tamaño pulga que si queremos reproducirlo todo en una única página de cien por cien centímetros; la sensación que generen ambas opciones será totalmente distinta. Por tanto, si hablamos de un soporte impreso, sabemos que nuestro objeto definitivo tendrá unas medidas determinadas, un volumen X y un número de páginas Y. Lo mismo ocurrirá con las publicaciones digitales, ya que en estas también hemos de establecer un número de páginas, así como un diseño de formato: cuadrado, rectangular apaisado, etc.

La página, unidad mínima de contenido

Cualquier publicación que encontremos parte de una noción de página. La página es el elemento básico de contenido que organizará nuestras publicaciones. Veremos más adelante que incluso hay publicaciones que están resueltas en una única página, pero siempre existirá esta medida, incluso si decidimos que nuestras páginas sean trozos de tela enormes impresos con una apisonadora y planchas de xilografía, como hicieron Clara-Iris Ramos y el equipo Espai Brut en el festival de autoedición Gutter Fest. La composición por páginas generalmente sigue el esquema portada + contenido + contraportada. Esta estructura básica nos la podemos saltar a la hora de hacer nuestra publicación, siempre y cuando conceptualmente este quiebro tenga sentido, o refuerce de algún modo la idea que queremos transmitir. Así hicieron Mario Santamaría y Blanca Crovetto en su publicación To my wife, cuya portada se encuentra en la página 91 y viceversa.

Figura 4. La Piconadora, fanzine colaborativo, Gutter Fest (6.ª edición, 2018), impulsado desde Modesta y Espai Brut
Fuente: <https://www.facebook.com/pg/fanzinotecalamodesta/photos/>.

Transmisión de ideas o información

De la misma manera que las publicaciones son unidades independientes o codependientes de contenido, también son elementos que nos cuentan una historia. No nos referimos tanto a historia en un sentido narrativo estricto, que también puede ser, sino al hecho de que cada publicación es el resultado de la voluntad de transmitir o expresar algo, sea de manera más descriptiva, sugerente o críptica. Nuestra publicación será un elemento que nos sirva de vehículo para expresar algo que queremos comunicar al exterior, compartir con alguien. En este sentido, es muy importante que cuidemos los detalles que la componen para que cada uno de ellos contribuya a contar la idea que queremos transmitir, desde la tipografía que utilicemos, pasando por el tipo de imágenes, los colores y su combinación, la estética general, etc. Asimismo, también es importante tener claro a qué tipo de público queremos dirigirnos, para ajustar el enfoque de manera que llegue correctamente a donde queremos.

Autoría

Como en todas las esferas de la vida, un proyecto se puede acometer en solitario o en compañía, todas las opciones son buenas mientras se adapten a lo que deseamos hacer. En el contexto de la microedición es muy frecuente la elaboración colectiva de publicaciones, la colaboración entre distintas personas para dar lugar a un único resultado final. Este proceso es muy recomendable. Una publicación puede estar hecha por una persona, por muchas a la vez, por varias que se encargan de distintas partes del proceso (redacción, imágenes, diseño, impresión, distribución…), por muchas autoras que se lanzan por primera vez a editar… Las combinaciones son múltiples y variadas.