4. Análisis de información

4.2. Análisis cuantitativo

El análisis cuantitativo utiliza herramientas provenientes de la estadística y las matemáticas. En general, este tipo de análisis se realiza a partir de números y sus objetivos principales suelen ser la identificación de magnitudes para permitir su comparación y las relaciones entre variables. Aunque estos objetivos suelen alcanzarse a partir de análisis estadísticos que requieren una cierta formación matemática, otros tipos de análisis permiten una aproximación más sencilla. El análisis cuantitativo se puede aplicar a los datos obtenidos por una encuesta o a datos estadísticos de fuentes secundarias que ya existen y están a vuestra disposición.

Por ejemplo, el análisis univariado consiste en calcular e interpretar algunos estadísticos sobre una única variable. Sobre todo, sirve para identificar magnitudes y distribuciones de un hecho o acto social. Los elementos estadísticos principales son los siguientes:

  • Frecuencia: es el número de veces que sucede un hecho concreto y definido.
  • Media: en caso de que la variable tenga valores numéricos, la media es el valor promedio, obtenido de dividir la suma de todos los valores entre el número de casos/observaciones.
  • Moda: es el valor de la variable que tiene una frecuencia más alta. Permite identificar el hecho que más ocurre.
  • Mediana: es el valor de la variable del caso u observación central, si todos esos casos u observaciones se ordenan de mayor a menor. Indica cuántos casos hay tanto por encima como por debajo de ese valor.
  • Desviación típica: es una medida basada en el promedio de todas las diferencias de cada caso u observación respecto de la media de la variable. Se obtiene una idea sobre si los valores de la variable se concentran cerca de la media o son muy dispersos.

El análisis univariado se puede complementar con un tipo de análisis más profundo, pero también sencillo, como es el bivariado. Este análisis consiste en la identificación de alguno de los anteriores elementos estadísticos en el cruce de dos variables. Normalmente, este análisis se realiza a partir de una tabla o tabla cruzada y dividiendo las variables en intervalos. El análisis bivariado permite intuir si existe algún tipo de relación entre esas dos variables.

Las tablas cruzadas anteriores podrían interpretarse como la prueba de una posible relación entre la edad y el número de museos que se visitan en un año, en la que a partir de los 30 años se visitan más museos. Por supuesto, esta relación no implica causalidad, es decir, no implica que a medida que se cumplen más años necesariamente se visiten más museos, pero sí permite que se puedan conjeturar mecanismos de relación. Estas relaciones suelen ir acompañadas por pruebas de significación u otros análisis multivariables que requieren un mayor conocimiento matemático, pero estas indicaciones básicas permiten hacer un primer análisis adecuado para estudios iniciales a pequeña escala. Finalmente, hay que subrayar que un análisis cuantitativo no termina cuando se extraen los resultados numéricos, sino que se debe complementar con métodos cualitativos y requiere también de una interpretación conceptual que dé sentido a los hallazgos dentro de un marco teórico determinado.